"La primera ley de la historia es no atreverse a mentir, la segunda, no temer decir la verdad" Su Santidad Leon XIII

viernes, 23 de diciembre de 2011

Arquitectos de la Cultura de la Muerte - Parte I

La Modernidad esta basada en principios creados por filósofos modernos. Nosotros nos movemos en este “espíritu de la época” pero muchas veces no conocemos como pensaban aquellos que nos han "construido la casa" donde habitamos diariamente. A continuación algunas citas de aquellos "constructores". Después de leer se preguntarán: ¿no será momento de mudarnos?

Arthur Schopenhauer, un “canto a la vida”

Para Schopenhauer lo espantoso es sinónimo de naturaleza y la desgracia sinónimo de vida:

“Comenzamos con la locura del deseo carnal y el impulso de la voluptuosidad, acabamos en la disolución de todos nuestros miembros y en el hedor de los cadáveres. Y el camino de uno a otro transcurre, en lo que hace a nuestro bienestar y el disfrute de la vida, siembre y continuamente cuesta abajo: las felices ensoñaciones de la niñez, la exultante juventud, los ajetreados años de la madurez, las enfermedades y los dolores de la vejez, el tormento de la última enfermedad, y finalmente, los estertores de la muerte. ¿No parece como si la existencia fuese un error cuyas consecuencias se nos hacen cada vez más evidentes?



Termina este canto a la vida diciendo que deberíamos considerar a todo hombre “en primer lugar y sobre todo como un ser que existe sólo como consecuencia de su culpa y cuya vida es una expiación del crimen de haber nacido

La consecuencia lógica de su pensamiento lo llevará a decir que “el mal es lo positivo, lo que se hace a sí mismo palpable, mientras que el bien, es decir, la felicidad y alegría, es negativo, la mera abolición del deseo y la extinción del dolor”

El profesor de filosofía del St. Jerome´s College, Ontario, Canadá, Donald De Marco nos dice que “la filosofía de Schopenhauer puede resumirse cabalmente en una concatenación de tres palabras: voluntad, lucha y desgracia. La voluntad se manifiesta a sí misma en todas partes como un impulso primordial para generar la vida. Pero como actúa sin regirse por ningún principio de organización –sin lo que los filósofos y teólogos medievales llamaban la Providencia-, lo que resulta es un terreno abonado para la guerra y la lucha. Y como cada cosa viva lucha por permanecer en la existencia, el mundo se convierte en un enorme campo de batalla. Este conflicto cruel y despiadado genera invariablemente una enorme desgracia. Y es el ser humano quien la experimenta de forma más aguda.”[1]

Queda claro esta actitud negativa hacia la vida cuando Schopenhauer dice que “las desgracias que conlleva la vida pueden aumentar hasta tal punto que la muerte, hasta entonces temida sobre todas las cosas, llega a convertirse en algo a lo que aspirar con avidez

Las citas de Schopenhauer están extraídas de:
Schopenhauer, Arthur: Essays and Aphorisms. New York, Penguin Classics, 1970.

[1] Donald de Marco y Benjamín D. Wiker, Arquitectos de la cultura de la muerte, Madrid, Ciudadela Libros, 2007, p. 31.

Friedrich Nietzsche, el “amante del prójimo”

Hacia el año 1870 había comenzado la guerra franco-prusiana y Nietzsche con solo 25 años presenció la impresionante marcha de un batallón de caballería que atravesaba la ciudad de Frankfurt. Sobrecogido por el espectáculo tuvo una visión que será la base y fundamente de toda su filosofía:

“Sentí por primera vez que la voluntad de vivir más fuerte y más sublime no se expresa a través de una miserable lucha por la existencia, sino a través de una volunta de la guerra, la voluntad de poder, la voluntad de dominación” [1]



Nuestro filosofo nos dice, en En torno a la voluntad de poder, que la filosofía, según la ha entendido y vivido hasta el presente, es la búsqueda voluntaria de los aspectos más repulsivos y atroces de la existencia [2]

[1] Citado por Elizabeth Forster-Nietzsche, The Young Nietzsche, Londres, 1912.
[2] Friedrich Nietzsche, “The Will to Power”, en Reality, Man and Existence: Essential Works of Existentialisms, Bantam, New York, 1965.

Charles Darwin, el biólogo “misericordioso”

Para Darwin los hombres civilizados “entorpecen el proceso de eliminación: construimos asilos para los imbéciles, para los lisiados y para los enfermos; promulgamos leyes para los menesterosos; y nuestros profesionales de la medicina ejercitan toda su habilidad para salvar la vida de cada persona hasta el último momento”. Así, el progreso de la medicina provoca una regresión evolutiva, porque “existen motivos para pensar que la vacunación ha preservado la vida de miles que, por su débil constitución, en otras condiciones habrían sucumbido a la viruela. La desafortunada consecuencia de esto es que “los miembros más débiles de las sociedades civilizadas propagan su debilidad” y es este obstáculo absurdo, porque nadie que haya presenciado cómo se crían los animales domésticos puede dudar de que ese obstáculo sea algo altamente dañino para la raza humana. Esto lo lleva a redefinir la labor de los lugares asistenciales: resulta sorprendente con qué rapidez unos cuidados erróneamente orientados, conducen a la degeneración de las razas de animales domésticos; pero exceptuado el caso del mismo hombre, apenas existe nadie tan ignorante como para permitir que sus peores animales se reproduzcan.



El biólogo “misericordioso” termina diciendo:

“El hombre revisa con un cuidado escrupuloso el carácter y el pedigrí de sus caballos, de su ganado y de sus perros antes de cruzarlos, pero cuando se trata de su propio matrimonio rara vez toma tales precauciones, si es que alguna vez lo hace”. Para evitar una mayor degeneración de la raza humana, “ambos sexos deberían abstenerse del matrimonio si son notablemente inferiores de cuerpo o de mente”. [1]

Charles Darwin, The Origin of Species, Mentor, New York, 1958.

5 comentarios:

  1. Es una aberraciòn o una taradez! (1)

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  2. Si hubiese quedado en el cuaderno de escritura de estos filósofos sería una taradez, pero muchas de estas obras han tenido miles de publicaciones, o sea, son una aberración

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  3. no apoyo el aborto, pero creo que la ley de aborto no va a hacer que mas gente se aborte, por que si alguien quiere hacerlo, lo hace de forma clandestina, poniendo en riesgo la vida de la madre, por ende es mejor que se haga de forma legal en un lugar controlado que en un lugar clandestino, por gente que puede no tener estudios no tomar las precauciones adecuadadas

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    1. al contrario es delante de Dios una falta que un país legalice la matanza de nonatos. Las naciones también van a tener que dar cuentas a DIOS al final de los tiempos.


      el día que te informes bien vas a dejar de decir idioteces...!

      http://www.catolicidad.com/2013/08/el-demonio-la-violencia-y-el-aborto-en.html

      Consecuencia, de que los obispos mexicanos no hicieron nada (o hicieron muy poco) cuando se aprobó el aborto en la Ciudad de México. Y signo, de la liberación por la que México pasará una vez que se hayan liberado las diócesis del mal que vino a raíz de la omisión de los obispos cuando se aprobó el aborto, y cuyo efecto directo son los homicidios en México. Por cada aborto habría un asesinato de parte del crimen organizado, que entre otras cosas hacen sacrificios rituales y misas negras a la "santa muerte" para obtener la protección del demonio en el negocio del narcotráfico.

      La liberación de México, señaló el P. Amorth, se obtendrá una vez que los obispos se arrepientan de su grave omisión, y una vez que se haga una gran cruzada en que los mexicanos consagren el sufrimiento que están padeciendo mediante su ofrenda personal. Una mención particular se hizo de la Basílica de Guadalupe, señalando que la Santísima Virgen está muy ofendida porque en la Ciudad donde está la presencia de su imagen grabada milagrosamente, se estén cometiendo miles de abortos. Después de que los obispos hagan ceremonias de reparación y México sea liberado, entonces se podrá derogar la ley del aborto en la Ciudad de México, origen de todos esos males que sufre la nación.

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  4. Osea es mejor matar legalmente a uno que ilegalmente a uno o a dos entre los cuales uno de los asesinados sin duda es inocente, indefenso, y no tuvo ningun derecho ni siquiera el tan en boga de poder casarse con una una persona de su mismo sexo :) (broma obvio)
    No, este es un argumento para convencernos ademas, aunque no se modificara el numero de mujeres que abortan es una aberración que el Estado legitime tal acto criminal, solo por eso (al menos) deberia estar condenado.
    Con respecto a estos "filosofos" al estudiar sus esquemas de pensamiento en la universidad siempre me decia, seguro este hombre es un fracaso por algun motivo sentimental o similar, y nosotros tenemos que estudiar un monton de cosas falsas que si las tomamos en serio nos amargan la vida. Al leer estas citas publicadas por historiador, creo que no estaba tan errada en mi pensamiento.

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